Familia: Poaceae
Antes: Gramíneas.
Especies comunes:
C. argéntea; C. richardii.
Nombre vulgar:
Carrizo de las pampas; plumeros.
Origen
Género formado por unias 15 especies de gramíneas procedentes de Sudamérica y Nueva Zelanda. La más conocida y empleada en jardinería, C.
, argéntea, es originaria de Argentina.
Descripción:
Gramíneas muy empenachadas o formando matas con hojas arqueadas, estrechas, glaucas y de gran longitud (3 metros). Las flores son grandes panículas en forma de espigas de color blanco o amarillo muy vistoso.
Cuidados básicos:
» recen bien con una exposición muy soleada, despejada y no demasiado fría. No son exigentes en cuanto al agua, pero agradecen en los días más calurosos del verano un buen riego, procurando no encharcar el terreno. Si el invierno puede sci crudo es interesante podar a tijera la planta dejando sólo 2 ó 3 palmos y protegerla los días más fríos con un poco de paja.
En la primavera volverá a brotar con fuerza y las espigas serán más numerosas.
Suelo y trasplante:
Como casi todas las gramíneas, no son nada exigentes en cuanto al suelo siempre que éstos drenen bien. Una buena tierra* de jardín abonada convenientemente cada año, les permitirá crecer vigorosamente. El trasplante se hace innecesario, pues la multiplicación se hace
directamente en el lugar de asiento mediante semillas o división de mata y a la salida de los fríos.
Abonado:
El general del jardín aplicado con carácter anual. Si se riega un par de veces con un producto rico en nitrógeno, fósforo y potasio durante su cultivo, las espigas serán más numerosas y mucho más vistosas.
Situación:
Las cortaderías encuentran una gran aplicación como adorno en las praderas llanas, en donde sus cimbreantes penachos serán todo un espectáculo durante el otoño. Para terraza puede emplearse una variedad enana C. a. pumila de hasta 2,5 metros, con penachos compactos, arqueados y teñidos ligeramente de rosa púrpura.
Plagas y enfermedades:
Son plantas sanas que por lo general se mantienen libres de plagas y enfermedades. Su principal enemigo lo constituye la lumedad excesiva que termina por amarillear las hojas y empobrecer los penachos.
Consejos útiles:
Las espigas una vez secas, rueden cortarse y emplearse para a decoración de interiores. Admiten la tinción en muchos colores, pero su aspecto más extraordinario lo adquieren con el tono crudo natural o ligeramente blanqueados.