Familia: Lardizabalaceae
Especies comunes;
Akebia quinata, (planta del chocolate)
Origen:
Ciénero’que incluye 5 especies originarias de las zonas templadas del este asiático.
Descripción:
Vivaces trepadoras de ramas leñosas y delgadas, hojas palmeadas, con folíolos que van de 3 a 5 y flores generalmente en racimos de color púrpura y olor muy agradable; los frutos son carnosos, del mismo color que ía flor y de forma cilindrica.
Cuidados básicos:
Requieren una exposición soleada, riego moderado pero constante y temperaturas suaves.
Suelo y trasplante:
Necesitan un suelo bien drenado pero que a la vez retenga la humedad, arenoso o limoso, enriquecido con turba, mantillo o conipos!. No soportan los suelos alcalinos, por lo que si queremos plantarlas en un jardín con estas características, hay que realizar antes una enmienda en el suelo.
Abonado:
Por ser plantas que duran largo tiempo, requieren un abonado orgánico con estiércol bien fermentado y descompuesto, aplicado al final de la época tría. También necesitan abonos
minerales quincenales durante la época de floración.
Situación:
Dado que son plantas trepadoras, su emplazamiento ideal será una pared de terraza bien soleada, o adosadas al tronco de un árbol alto como, por ejemplo, una palmera del género Chamaedorea o Phoenix. Si se sitúan en una pared es conveniente disponer alambres o cuerdas para que las ramillas puedan sujetarse.
y enfermedades:
Generalmente se mantienen libres de plagas.
Consejos útiles:
La multiplicación podemos hacerla mediante semillas, cuando éstas hayan adquirido la madurez. Oíros dos sistemas, tal vez más seguros, son el acodo que se realiza en primavera y el esqueje, cuya mejor época de realización es al final del verano y sobre cajonera caliente. Las akebias, lo mismo que las madreselvas, tienen un tupido follaje y grato aroma, por lo cual son muy apropiadas para realizar múreles de separación. Puesto que suelen crecer de forma rápida es necesaria una poda de las ramas secas y terminales durante la época fría.